miércoles, 22 de agosto de 2018

Recuerdos de mi primera comunión( 1965)


Me faltaban tan solo un mes para cumplir los 7 años cuando recibí mi primera comunión,
vestido de marinero con pantalón largo,el traje me lo presto Joselito Carbonero,
ahijado de mi padre Ricardo.
En este año fui alumno del Colegio María Auxiliadora (Salesianas) 
donde pase parte de mi infancia,recuerdo  de esta etapa a Sor Carmen y a Sor María donde cada tarde nos daban una merienda (Pan con Chocolate)la clase estaba en el patio,mi fama de que quería ser torero me llevó a protagonizar una  corrida teatro , un servidor como torero,José Antonio Noguera de picador y Pedro Hacían de caballo,oreja y vuelta al patio donde los asistentes aplaudieron exclamando !!olé Torero!!,días felices con momentos inolvidables.
El desayuno se celebró en una de las sala del Casino como era de costumbre,chocolate y churros del Bar de Manolo(Bar la Plaza),después de visitar a mis abuelos, mis tías y vecinas creo que tenía un monedero lleno de monedas que me parecía una fortuna,mi madre me quito los pocos billetes que había y me dejó las monedas, por la tarde busqué a mis amigos y los invite al cine Cataluña, compramos chucherías y pasamos la tarde viendo una de romanos.Tras la comunión llegó el verano y mi operación de amígdalas y después de vegetación,a mi madre se le pasó el plazo de inscripción en el colegio del grupo y me apunto al colegio de los Hermanos Maristas,1965-1966,comencé en segundo grado con el hermano Fernando,entrañables recuerdos de esta temporada,en el 1967 regresó de nuevo al colegio del grupo donde termine mis estudios de quinto grado con don Francisco Linde en 1971.Con 13 años, mis padres ya era familia numerosa y me ponen a trabajar en el Bar de Manolito el Sargentillo y a partir de mi primer trabajo de camarero no parare de tomar experiencias de múltiples trabajos,siendo uno de mis hobbies los mosaicos.Toda infancia tiene sus recuerdos,trozo a trozos recompongo mis vivencias,común o similar a la de mis amigos,tiempos de inocencias y de juegos que siempre quedarán en un rincón de mi corazón.




Colegio de Enseñanza Salesianas Hijas de María Auxiliadora
Este  centro fue cedido a las Hermanas Salesianas por la Familia de D. Pablo Romero para su enseñanzas finales de los años 40, lugar cercano a la Capilla de Jesús es una de las más modestas, pero se venera en ella una antigua imagen, muy querida en la ciudad.En tiempo posterior D. Pablo Romero quiso reclamar esta capilla como de su propiedad, pero al encontrarse hundido en la pared un azulejo que dejaba la huella de su propietario, pasó a ser propiedad de la propia hermandad hasta nuestros días.
Después de un año cerrado el colegio de las Hermanas Salesianas, Don Bernabé solicita a estancia del director del Seminario una petición a la familia de D. Pablo Romero para que pudieran utilizar este espacio como Centro Juvenil don Bosco para los jóvenes sanluqueños/as para su formación en las artes y espiritualidad.A partir de 1967,este  centro juvenil atraería la atención de la juventud sanluqueña donde tendrían un espacio de encuentros,diversión y formación en las artes escénicas y musicales, que tuvieron su repercusión en la ciudad originando actuaciones de teatro,música y competiciones de juegos hasta su cierre en 1972 y la posterior marcha de los Hermanos seminaristas.



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